domingo, 28 de noviembre de 2010

El escaparate

De forma común casi como un simil, se dice que los artistas están expuestos como objetos de arte en un "escaparate" para que el público en general los examine y manifieste su opinión con la valoración personal que les merecen.

La gran dependencia de éstos para lograr su divulganción y reconocimiento hace que acepten ese llamado "escaparate"actuando en teatros, festivales, tablaos, etcétera, con el deseo de obtener poco a poco una merecida fama, pero dependiendo siempre del buen hacer y humor del crítico del momento sin opción a réplica alguna.

No cabe duda que para obtener un justo criterio en cualquier arte o profesión se precisa de unos niveles adecuados de información y formación para disponer de los conocimientos necesarios que permitan establecer un juicio correcto. La opinión o gusto personal sin estos conocimientos, es sólo eso, una expresión personal, pero sin valor alguno para darle crédito. Sin embargo, cuando se escribe u opina en los medos de difusión o en la publicación de un libro, la responsablidad que conlleva a quien lo realiza, exige una veraz información, formación adecuada y la total honestidad.

Saber discernir con adecuado juicio sobre las actuaciones, labor profesional y comportamientos personales de los artistas, depende de la propia sabiduria para comprenderlos y llegado el caso apoyarlos o refutarlos con respeto.

El auge actual del Arte Flamenco y sus artistas recién catalogado como Patrimonio Cultural de la Humanidad es un tema interesante para que cualquier persona se sienta atraida para escribir u opinar sobre esta maravillosa manifestación artística y sus profesionales. Sin embargo, la ignorancia es muy atrevida dice un reconocido refrán y en dicho arte campa en muchas ocasiones a su libre albedrío y sin ningún recato. Parece increíble que se pueda escribir emitiendo juicios u opiniones sin poseer un mínimo de información y formación adecuada que avale lo que se escribe o dice. Puede ser comprensible hasta cierto punto, que el parentesco, paisanaje o simpatía hacia ciertos artistas influya en los comentarios o críticas que se promulgan, pero falsear la verdad con conocimiento de causa o por carecer de la información adecuada además de incorrecto es totalmente injusto. Ello, además de demostrar la ignorancia o malicia de la persona que los emite, puede perjudicar seriamente el buen del nombre de este arte y sus profesionales y generar socialmente el criterio del escaso nivel cultural que acompaña a algunos aficionados y críticos de esta maravillosa manifestación artística y musical. Hecho y también responsabilidad, que deberían tener bien presente todos aquellos que deciden manifestar sus comentarios y críticas mediante escritos u opiniones en libros o en los medios de difusión.